Jorge Ortuño

Biografía .

Inventar, descubrir, crear, jugar, apasionarte, obsesionarte y soñar despierto son los motivos que te hacen amar el arte, al menos lo son para mi, y no puedo entenderlo, para nada, como un oficio sino como una forma de vivir. Un dulce e irremediable estado mental que te impulsa constantemente a mirar a tu alrededor, atrapando lo que excita tu imaginación y alimenta tu curiosidad, para más tarde transformarlo en una obra.

Me inclino por la expresión en bruto, manteniendo la mente ajena a lo académico. Prefiero la alegría de lo carnal, interpretando el mundo que me rodea con un lenguaje que no va dirigido a los ojos sino a los sentimientos y a la sensibilidad del que observa, dejándome llevar por el gesto y la intuición, frente al análisis intelectual. Las temáticas de mis obras son variopintas pero reconozco un denominador común en su mayoría, que es la presencia de la figura humana. No es algo buscado, tan sólo fruto de mis intereses: las personas y todas aquellas circunstancias que las rodea. Un tema infinito para una sola vida.

Soy un autodidacta y como tal trabajo con una enorme alegría e insistencia viendo frente a mí todo lo que aún me queda por aprender y experimentar. Una gozada. No creo en el aprendizaje académico porque si sigues las opiniones de unos, las directrices de otros y te dedicas a buscar la aprobación de los de más allá no sé exactamente cómo va a subsistir tu propia personalidad. Por supuesto, teoría sólo aplicable a mi caso particular. Todos los caminos llevan a Roma, dicen.

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